viernes, 23 de febrero de 2018

La idiotización de la sociedad como estrategia de dominación


La idiotización de la sociedad como estrategia de dominación
AUTOR: FERNANDO NAVARRO
La gente está imbuida hasta tal extremo en el sistema establecido, que es incapaz de concebir alternativas a los criterios impuestos por el poder.
Para conseguirlo, el poder se vale del entretenimiento vacío, con el objetivo de abotagar nuestra sensibilidad social, y acostumbrarnos a ver la vulgaridad y la estupidez como las cosas más normales del mundo, incapacitándonos para poder alcanzar una conciencia crítica de la realidad.
En el entretenimiento vacío, el comportamiento zafio e irrespetuoso se considera valor positivo, como vemos constantemente en la televisión, en los programas basura llamados “del corazón”, y en las tertulias espectáculo en las que el griterío y la falta de respeto es la norma, siendo el fútbol espectáculo la forma más completa y eficaz que tiene el sistema establecido para aborregar a la sociedad.
En esta subcultura del entretenimiento vacío, lo que se promueve es un sistema basado en los valores del individualismo posesivo, en el que la solidaridad y el apoyo mutuo se consideran como algo ingenuo. En el entretenimiento vacío todo está pensado para que el individuo soporte estoicamente el sistema establecido sin rechistar. La historia no existe, el futuro no existe; sólo el presente y la satisfacción inmediata que procura el entretenimiento vacío. Por eso no es extraño que proliferen los libros de autoayuda, auténtica bazofia psicológica, o misticismo a lo Coelho, o infinitas variantes del clásico “cómo hacerse millonario sin esfuerzo”.
En última instancia, de lo que se trata en el entretenimiento vacío es de convencernos de que nada puede hacerse: de que el mundo es tal como es y es imposible cambiarlo, y que el capitalismo y el poder opresor del Estado son tan naturales y necesarios como la propia fuerza de gravedad. Por eso es corriente escuchar: “es algo muy triste, es cierto, pero siempre ha habido pobres oprimidos y ricos opresores y siempre los habrá. No hay nada que pueda hacerse”.

sábado, 17 de febrero de 2018

EDITORIAL DE FEBRERO

MANIPULACION DE LA FE

Mucha gente supone que la religión es cosa de niños, mujeres y ancianos, esta es una creencia muy arraigada en la sociedad y proviene de una deficiente, por no decir mala, formación en los momentos en que pasamos por la Iglesia para “cumplir” con ciertas costumbres que hacen a la práctica corriente en las familias: “al nene/a hay que bautizarlo, confirmarlo y que tome su primera comunión”, con esto nos quedamos tranquilos y si el “nene” o la “nena” decide algún día casarse por iglesia, entonces allí vuelve a visitar el templo, con esto queda cerrado el álbum fotográfico familiar, posiblemente se iniciará otro similar en la nueva familia.
Esto que es muy común verlo en la realidad parece no inquietar a muchos sacerdotes ni a los agentes pastorales que participamos de la vida parroquial, seguro que si lo hiciéramos tendríamos que reconocer que en algo estamos fallando, la tarea pastoral no es una simple actividad en la cual nos sentimos tranquilos por hacer algo bueno o simplemente practicar un poco de catarsis para olvidar nuestros propios problemas.

EL INFORME ROCKEFELLER

Lamentablemente la mayoría de las personas que se dedican a la política piensan de la misma manera respecto al tema religioso, sin embargo no es así en aquellos que tienen por finalidad dominar al mundo desde el poder político y financiero.
Creo que desde hace unos 50 años, a partir del Concilio Vaticano II y luego las Conferencias Episcopales de Medellín y Puebla, la imagen de la Iglesia Católica ha cambiado mucho en América Latina. Se puede decir que no suficientemente y estoy de acuerdo, pero ha cambiado enormemente, justamente por su acercamiento a los pobres.