lunes, 26 de marzo de 2012

164º ANIVERSARIO DE TANTI

Con motivo de conmemorarse el 164º Aniversario de Tanti, la Municipalidad invitó a la comunidad al Acto central de dicha celebración.
Así como el 23 de marzo de 1848, los vecinos se congregaron para celebrar la Eucaristía en la Capilla que actualmente es la Parroquia, hoy también nos hemos reunido para compartir el pan y el vino, tomando el símbolo que estos dos elementos representan, en ellos convergen el fruto de la tierra y el trabajo del hombre, por ello podemos decir que Tanti nació con la bendición de Dios para ser un pueblo donde el trabajo nos lleve hacia un horizonte de grandeza, con humildad, honestidad y especialmente en forma solidaria.





Estuvieron presentes el Sr. Intendente Municipal Dr. Luis Azar, quien pronunció un discurso alusivo a la fecha, funcionarios del Departamento Ejecutivo, miembros del Concejo Deliberante y Tribunal de Cuentas, abanderados con sus escoltas de las escuelas del pueblo, de agrupaciones gauchas locales y de comunidades vecinas. Presidió la Misa el Cura Párroco P. Diego Montiel.


La Banda de la Escuela de Suboficiales de Gendarmería engalanó con sus acordes el grato momento celebratorio.







Transcribimos la Historia de Tanti que escribiera la Prof. Rosa Areal de Molina.

Entre los indígenas que ocupaban las provincias de Córdoba, encontramos al Sur-Este a Los Pampas, al Nor-Este a los Sanavirones, al Norte en su límite con Santiago del Estero a Los Tonocotes, al Oeste en su límite con La Rioja a Los Olangastas y en toda la región serrana de Norte a Sur de la provincia a Los Comechingones llamados los del Norte Henias o Indonas y  a los del Sur Camiares; aunque esta división era solo lingüística. Esta cantidad de Tribus, sus divisiones y el lenguaje de las mismas fue, sin duda lo que hizo decir al misionero jesuita Don  Alonso Barsana en 1594: “son tantas las lenguas habladas en Córdoba que a cada media legua se tropieza con otra diferente”.
En la zona serrana, de indescriptible belleza y en corazón de su hermoso valle se encuentra la población de Tanti.
De la expedición al mando de Don Jerónimo Luis de Cabrera y que erigiera la ciudad de Córdoba, que habría de construir en el futuro el punto de partida real, imprescindible, forzoso de las expediciones enviadas por él a sus sucesores al reconocimiento del país, se desprendió un grupo de valientes que recorrió, por primera vez, en tren de expedición y de conquista el hermoso y dilatado Valle de Punilla, desde el Quisqui-Sacate  que le daba nacimiento hoy dique o lago San Roque) hasta Cosquín  y Tininpala, Canabalumba y Escova, exponentes toponímicos de la paleografía del valle  punillano, tomado este en toda su extensión norte-sur y asignando a nombre de la Corona de España, el 1º de septiembre de 1588 el valle o zona territorial que ostentaba el nombre con que la bautizaron los españoles al visitarla, quizás les ataco también la Puna o el Soroche, aunque no con tanta intensidad como al aventurarse por la Puna camino a Jujuy de ahí el diminutivo, según el decir del reverendo Padre Pablo Cabrera, nombre que se hizo extensivo a todo el Valle de un extremo al otro.
Al Valle de Punilla se lo conoció como Punilla de los Jaimes a los del norte y Punilla de Aragón a los del sur, siendo esta la tradicional autóctona.  En ésta se levanta la población de Tanti, antiguamente llamada Cuchi-Corral o Potrerillo de Cuchi-Corral más tarde Tanti Cuchi y actualmente Tanti, el los terrenos llamados de los Bustos y Gaete del Rosario, ascendientes del General Juan Bautista Bustos. El sometimiento de los aborígenes (comechingones pacíficos) al dominio español no impuso el tributo de sangre y el apostolado evangélico los redujo sin mayores dificultades a la fe.
Tanti, que fuera creada como posta de la primera jornada en el camino entre Córdoba y San Juan, era hasta el siglo XVIII, una pequeña población cuyas tierras estaban en su mayoría ocupadas por estancias, resultado del otorgamiento de las Mercedes, que en nombre del Rey de España, realizará Don Lorenzo Suárez de Figueroa, extensiones estas divididas por herencias y que han evitado los grandes latifundios.
Paraje rico en tradiciones y recuerdos históricos, prehistóricos y coloniales por el accionar de sus hijos que no vacilaron en abandonar su terruño cuando las circunstancias se lo pedían y así los vemos interviniendo en el cuerpo de arribeños en 1807, contra la segunda invasión inglesa, tomando parte en el ejército del Norte, cuando nos independizamos de la Madre Patria.
Nativo del Valle fue el Brigadier General Don Juan Bautista Bustos, gobernador de Córdoba de 1820 a 1828 de quien dice Vicente Sierra: la historiografía no se ha detenido en su personalidad como se merece. Fue un gobernante de muchos más méritos que los que las pasiones de la política han permitido reconocerles.
También fue en el Valle de Punilla donde conoció la derrota. Mientras tanto Tanti seguía su vida sencilla, tranquila, religiosa, de acuerdo a las normas morales enseñadas por sus antepasados, y así vemos que 1848 uno de sus hijos solicita la creación de una capilla.
La importancia de la religión en todos los tiempos, nos permite afirmar que es connatural a todo ser humano y que su influencia en la civilización es la única garantía permanentemente valedera de la ley moral que hace posible una sociedad ordenada y coherente, encontrándose siempre en la base de las verdaderas conquistas.
El Dr. Gaspar Martierena, más tarde Deán de Córdoba, autorizó por su mandato, al ciudadano Don Diego Bustos, vecino del curato de Punilla, y a su pedido, a erigir a sus expensas una capilla pública y en terrenos de su propiedad, en el lugar denominado Tanti-Cuchi y bajo la advocación de la Santísima Virgen del Rosario (el original de la cual, según el decir de los pobladores más antiguos, en el domicilio de la familia Cuello-Bustos) en la que pueda celebrarse el Santo Sacrificio de la Misa a cualquier sacerdote regular o secular aprobado y para que puedan cumplir con este precepto todos los fieles que la oyeran, sin excluir el cumplimiento anual, con la condición de que la referida capilla sea de paredes decentes, teniendo salida al campo o camino público, buena llave y aislada de toda otra habitación particular, que esté con decente adorno y que tenga todos los parámetros sagrados para la celebración de los oficios y, “por cuanto a todo fundador de este género de obras y sus descendientes, corresponda el patronato de ellas, declaramos que verificado sea la total conclusión de la referida capilla, toca y pertenece , su patronato a Don Diego Bustos con transmisibilidad a todos sus descendientes”, según consta en título fechado en Córdoba el 21 de marzo de 1848.
La capilla todavía se conserva en su construcción original, y n donde en el mes de octubre se celebraran anualmente las fiestas patronales que atraen a numerosos fieles.
Don Diego Bustos donó la Iglesia en memoria de sus padres, Don Jorge Francisco Bustos (hermano del General) y Doña Luisa de Arrascaeta, los que están enterrados en el altar mayor. A su muerte el donante fue enterrado en la pila bautismal a la entrada izquierda de la Iglesia.
Tal vez resulte extraño al visitante comprobar que la entrada de la misma no este mirando al camino, sino para atrás y esto es debido a que la casa del donante estaba situada (todavía en pie) mirando hacia la puerta de la Iglesia, y que él, ya anciano, contemplaba desde su lecho. La primera misa fue celebrada el 22 de marzo de 1848.
Sus recintos augustos fueron visitados muchas veces por sacerdotes eminentes, entre los que podemos nombrar a Fray Rafael Luján de Medina, Prior del Convento de predicadores de Córdoba y Rector de la Universidad de Santo Tomás de Aquino, el Obispo Diocesano Don Ramírez de Orellano, los Presbíteros Juan Eusebio y Filemón Cabanillas, el Dr. Gregorio Funes, más tarde Deán Sotacura de la Parroquia del Valle de Punilla (el que si bien no nacido en el Valle, lo unían lazos de parentesco por su madre, Doña Josefa Bustos), etc, que desempeñaron las funciones del Ministerio.
Tanti, posta en el camino a San Juan, era fin de camino carretera y punto de unión con Mallín, El Durazno, Cerro Blanco, Los Gigantes, Taninga, etc. por sendas transitadas solamente a caballo, que más tarde fueron transformadas en caminos provinciales o nacionales.
Su población está edificada en las márgenes del arroyo Tanti, que con el nombre de Las Mojarras va a aumentar las aguas del Dique San Roque.
Arroyo de aguas cristalinas, ferruginosas bicarbonatadas, según consta en los análisis realizados por el Dr Moreno, de acción hidrotermal, posee baños y piletas naturales que hacen las delicias de sus habitantes y de los turistas.
La actual población de Tanti (antiguamente separada en Tanti nuevo y viejo) fue edificada en las cabeceras de las estancias de Rómulo Bustos, Serafino Bustos, Juan Bustos y Diego Bustos, y la de Tanti nuevo, Modesto Bustos (estos dos últimos hermanos, hijos del donante de la Iglesia). Sus terrenos fueron luego divididos por sus descendientes y vendidos por parcelas.
COPIA DEL ORIGINAL QUE SE ENCUENTRA EN LA BIBLIOTECA POPULAR ROSA AREAL DE MOLINA, MOTIVO POR EL CUAL LOS SOCIOS FUNDADORES DE TAN NOBLE INTITUCIÓN DECIDIERON DAR COMO NOMBRE  EL DE LA PROF. AREAL DE MOLINA.


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